Cuando decidí montarle la habitación a Alicia me apetecía ponerle en una pared un papel bonito o un mural infantil de los que les vendo a mis clientes, pero cuando llegó el momento pensé "y por qué no se lo hago yo?".
Unos años antes me había lanzado a pintar uno en una zona del salón, así a lo loco, sin más guía que una tela que me había gustado y el resultado fue bueno, con lo que me envalentoné.
Eso si, en esta ocasión me hice con todo lo necesario, pinturas buenas y diferentes pinceles porque la otra vez cogí lo primero que tenía por casa, incluso algún rotulador y esta vez prefería estar bien preparada. La ocasión lo requería!
Elegí el diseño de un catálogo, me lo llevé a casa para "inspirarme" y sin anestesia pero con un lápiz, empecé a dibujar la pared, a ojo. Por eso digo lo de inconsciente...
Y a darle COLOR!!!!! Me lo pasé pipa.
Me hacía mucha ilusión que participaran mis sobrinas, para que cuando Alicia sea mayor, tanto si el mural sigue ahí o lo vea en fotos, sepa la ilusión con la que todos la esperábamos.
Creo que es especial implicarse personalmente en la habitación de tu hijo, seas o no seas "artista". ¿Qué más da? a ellos les va a rechiflar y no te van a poner nota!
Lo mejor, la carita que puso Alicia cuando vió por primera vez la pared, que hasta tiene bichos pegados.
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Ya va cogiendo forma!
Las artistas; no están todas...
Terminando ya...no me lo puedo creer!
La habitación ya está lista! La mantita a los pies de la cama es una manualidad más. hecha con retales de muestrarios de telas...pero no la hice yo!
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