Mini Candy Bar

domingo, 10 de abril de 2011

Terrones Nocturnos

Lo mejor de todo es oírte contar esta anécdota. Porque para los que no conozcáis "físicamente" a Miss Owl, os diré que es de las personas más finas, delicadas y bien educadas que yo conozco...así que imaginarte salivando tal cual Hommer Simpson ante un donnuts, siempre me resultará, cuanto menos, chocante...



¿Que como me gustan los antílopes? No muy hecho, por favor.

A falta de pocos días  para las vacaciones de Semana Santa, y con eso de que todo el mundo está preparando el viaje, se me ha refrescado la memoria y me ha venido al recuerdo uno genial que hicimos Mr. Owl y yo, hace ya unos cuantos años.

Recuerdo el  día que me propuso que nos fuéramos 15 días a Namibia. Dios mío, Namibia! Juro que tuve que buscarlo en el mapa... Supongo que el día que en clase de geografía explicaron el África subsahariana... yo no estaba.

Pues sin saber exactamente su ubicación en el atlas, acepté y nos dispusimos a prepararlo con todo detalle. La verdad es que fue maravilloso. Tenía un concepto bastante "regular" de África; ya os conté que había estado en Senegal, y la experiencia no fue del todo satisfactoria. Pero me entregué plenamente a aquel viaje tan lejos y tan bonito que íbamos a hacer juntos. Supongo que imaginé algo así como "El paciente inglés", pero sin las quemaduras (del paciente), por supuesto.


Salimos de aquí, con destino París, y desde allí, directamente a Johanesburgo. Al llegar, hicimos noche en un hotel cerca del aeropuerto, y a la mañana siguiente nos subimos a un "avioncito" - de tan solo 50 pasajeros- hasta el aeropuerto internacional de Walvis Bay, aterrizando casi en plena duna.

Con un coche, nos recorrimos gran parte del país, dormíamos en hoteles preciosos, dignos de película. Recuerdo uno en concreto, que dentro del recinto del propio hotel tenía un gran estanque lleno de explendorosos flamencos y un hipopótamo, que campaba a sus anchas por el jardín. Era en el gran Parque Natural de Etosha. Impresionante.


Namibia es un país increíble, lleno de contrastes. Un claro ejemplo es la carretera que conecta Walvis bay con Swakopmund, a mano derecha está el desierto del Kalahari, a mano izquierda la inmensidad del Atlántico. Es una vista maravillosa.

Pero de todo lo increíble que tiene Namibia, yo me quedo con tres anécdotas:

La primera es nada más llegar, cogimos un taxi rumbo al hotel, y en una de las calles de Walvis algo extrañamente familiar llama mi atención: un supermercado Spar, si, de esos que tienen como logo un pinito verde, y hace años te daban sellos para pegar en no sé qué cartones. Fue la monda. Me hizo gracia, aunque pensé que era bastante poco exótico un spar, a más de    7.294 km de casa...


La segunda fue que tras instalarnos en el hotel, salimos a dar un paseo por la ciudad y a tomar algo. Entramos en un bar, y de fondo se oye:
- taratarata....
 No me vuelvo a enamorar...
me da miedo la tristeza...
me hace daño hasta el  llorar...
el vivir de esta manera...

Como os lo cuento. Julio Iglesias era la banda sonora de un bar de Namibia.  Fue la monda. Mr. Owl y yo nos miramos y empezamos a reirnos sin parar. Al momento lo entendimos todo. Walvis Bay es una pequeña ciudad costera, que aunque solo tiene unos 65.000 habitantes, en realidad es un importante puerto pesquero, en el que abundan hombres de mar, o más bien debería decir "hombriños de mar" pues  la gran mayoría son gallegos. Eso lo explicaba todo. Aquel bar estaba regentado por un marinero originario de Ribeira, un pueblecito de la provincia de A Coruña.


Pero si algo recuerdo de Namibia es su gastronomía. No os digo más que en los 15 días que estuvimos allí engordé 7 kilos, y solo comía carne. Impresionante. Recuerdo cuando íbamos en los camiones de los safaris y nos señalaban animales como el Orix o el Kudu, y la gente gritaba:
- Oh! It´s beautiful!
Y a mí lo único que me salía era:
- Oh! That´s tasty! I had dinner yesterday, and is very tasty! (lo cené ayer y es espectacular...!) Me salió del alma. La gente me miraba con mala cara... Seguramente sería por mi mala pronunciación, porque todo lo que dije era verdad!


A partir de ese viaje cambió mi opinión sobre dos cosas:  África y  la ternera gallega... ya os podeis imaginar!

Miss Owl

2 comentarios:

  1. Muy bueno lo de la ternera gallega!!!Que puntazo lo de Julio y menudo valor, Namibia!!

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  2. Oh Gracias Dina! De valor nada. Es el mejor viaje que he hecho. Es un pais espectacular, iría ahora mismo de nuevo. La verdad es que no me imaginaba que me iba a sorprender tanto, pero para bien. Un beso!

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