Una combinación que nunca habíamos utilizado es ésta: amarillo y verde menta.
El encargo era muy comprometido...nos lo hacía una de nuestras embajadoras!!!
Mónica desde un principo nos apoyó con todas sus armas...así que os podéis imaginar la presión... La Mini Candy Baby era un regalo para su sobrino Jaime, ni más ni menos.
Sabemos que le gustó mucho y en Facebook nos dejó un mensaje de los que nos anima el día.
Mil gracias, embajadora Mónica!
Qué barbaridad, cada Mini Candy que haces te superas un poquito y nuevamente he de decir, de dónde demonios sacas tantas chucherías de los colores deseados???Increible
ResponderEliminarAy Dios mío! Es preciosa! Me parece un regalo preciosisisismo... una muy buena forma de endulzar, más si cabe, la llegada de un bebé!
ResponderEliminar;)
Dina, lo de las chuches es un caso de busca y captura...
ResponderEliminarMarian, esa es lo que queremos, endulzar, endulzar y endulzar y si además conseguimos que os parezca algo precioso pues ya nos quedamos encantadísimas!
Muchas gracias al as dos por vuestros comentarios.
Rebeca